TERRA 95.5 FM Las Terrenas | República Dominicana
Cuando el frío se instala de verdad, las ventanas se convierten en ese punto débil de la casa que nadie quiere admitir. Da igual lo nuevas que sean: si el aislamiento falla, el aire gélido encuentra huecos invisibles. Muchos hogares notan cómo la temperatura cae en picado sin que haya una corriente evidente.
Y sí, suele venir del mismo sitio: el cristal y el cajón de la persiana. Dos enemigos silenciosos que encarecen la calefacción sin que uno se dé cuenta porque generan una pérdida constante de confort sin que apenas lo veamos.
En estos meses, cualquier solución que evite perder calor es bienvenida, pero no todo pasa por cambiar ventanas ni por reformas caras. El influencer de bricolaje Alberto Rodríguez (@albermaker) ha explicado un par de métodos caseros que ayudan a mejorar ese aislamiento sin gastar más de lo necesario, y lo mejor: funcionan en cuestión de minutos. Son pequeños trucos temporales y provisionales pero muy útiles para sobrevivir al invierno.
El primero está centrado en el cristal, que aunque no lo parezca, deja pasar más frío del que debería. Rodríguez habla de un sistema clásico que en España no es tan habitual, pero que en países del norte es casi obligatorio: crear una cámara de aire adicional. La idea es «low costa»: sencilla y efectiva, especialmente cuando las ventanas no son de alta eficiencia.
Para lograrlo, basta con colocar cinta de doble cara en el marco y pegar encima un plástico transparente bien tenso. No hace falta que sea grueso: lo importante es que cubra toda la superficie del cristal.
Según explica el propio Alberto, ese hueco de aire que queda entre el plástico y el vidrio actúa como un colchón térmico que reduce la entrada de frío y estabiliza la temperatura de la habitación. Es como una chaqueta adicional.
Una vez colocado el plástico, solo queda aplicar calor con un secador de pelo para tensarlo. Este paso ayuda a que quede firme, sin arrugas y mejor ajustado al marco, lo que evita filtraciones. El resultado es casi inmediato: menos sensación de pared fría, menos condensación y un ambiente general más confortable sin subir la calefacción.
El segundo método apunta al verdadero culpable en muchas viviendas: el cajón de la persiana. Ese hueco, diseñado solo para la mecánica, suele ser un coladero de aire helado, especialmente en edificios antiguos. En realidad es uno de los puntos donde más energía se pierde en invierno. Por eso, Rodríguez recomienda actuar ahí antes que en ningún otro sitio.
Su propuesta es usar un rollo térmico reflectivo, un material barato que suele encontrarse en ferreterías o tiendas de construcción. Solo hay que retirar la tapa del cajón, medir el hueco y recortar un trozo del aislante con ese tamaño. Luego se coloca entre la tapa y la propia persiana, dejando el mecanismo libre pero bloqueando la entrada de aire desde el exterior.
El proceso es tan rápido que sorprende el resultado. Una vez se vuelve a colocar la tapa, el cajón queda protegido y la sensación de corriente desaparece. Esto da lugar a un cambio notable en el confort de la habitación tras instalar el aislante, especialmente por la noche.
Estas son técnicas no son incompatibles, sino que combinando ambos trucos se consigue un nivel de aislamiento bastante más alto sin meterse en obras ni cambiar ventanas.
Son soluciones temporales, pero eficaces y de muy bajo coste, ideales para pasar el invierno sin que la factura energética sea la protagonista del mes. Una prueba más de que, con un poco de ingenio, se puede ganar mucho calor sin perder dinero.
Fotos | Pexels, Unsplash
En Decoesfera | Tres trucos sencillos para preparar tu casa para cuando llegue el frío: ahorrarás en calefacción
En Decoesfera | Mantener la calefacción siempre al mínimo o apagar y encender varias veces al día ¿qué opción es mejor?
–
La noticia
Despídete del frío que se cuela por la ventana: así se aíslan los cristales y el cajón de la persiana de manera casera
fue publicada originalmente en
Decoesfera
por
Joana Costa
.
Escrito por Redacción Terra FM
TERRA 95.5 FM - BY PMEDIALAB