Esta es la sustituta de las antiguas mamparas en la ducha: más luminosidad, practicidad y modernidad

Quien se plantee renovar el baño se encuentra hoy con un catálogo de opciones más variado, y estético, que hace apenas unos años. Las antiguas mamparas, robustas y visualmente pesadas, han dejado paso a soluciones que buscan una mayor luminosidad espacial, líneas limpias y una sensación general de amplitud. 

La idea dominante es clara: menos es más, sobre todo en estancias pequeñas donde cada centímetro cuenta. Elegir el plato de ducha adecuado, la mampara y hasta el diseño de la alcachofa puede generar más dudas que entusiasmo inicial. 

Las tendencias del diseño

Por eso, las recomendaciones de interioristas y portales especializados ayudan a entender hacia dónde se mueve el diseño del baño contemporáneo. Algunos aspectos son clave y están ya marcando tendencia en los estudios de decoración actual.

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Duchas italianas

Durante años, las duchas italianas han sido la referencia absoluta. Su estructura a ras de suelo, sin plato visible, y sus mamparas de media hoja ofrecían continuidad visual y un estilo minimalista muy apreciado. 

Esta solución sigue teniendo defensores por su comodidad y por la sensación de ligereza que aporta. Sin embargo, empiezan a quedar atrás frente a nuevas propuestas que priorizan un control más eficiente del agua dentro del espacio de ducha.

Duchas cerradas

En paralelo, las duchas completamente cerradas, pero con una particularidad importante, la ausencia de marco, se han consolidado como una opción moderna y elegante. Estas serán la verdadera tendencia de 2026.

Las puertas de cristal de gran formato, que cubren todo el ancho de la ducha, proporcionan un acabado limpio y muy actual. Este tipo de diseño funciona especialmente bien cuando se combina con un plato discreto y materiales que no saturen la vista.

Duchas ‘walk-in’

Al otro lado de la balanza están las duchas walk-in, que han ganado popularidad en los últimos años. Su estética abierta y accesible es atractiva, pero muchos expertos advierten de sus limitaciones prácticas. Las salpicaduras fuera del área de ducha son habituales, lo que obliga a limpiar más y puede resultar incómodo en baños utilizados por varias personas. 

Incluso se menciona un detalle doméstico muy reconocible: las huellas de las mascotas cuando atraviesan la zona aún húmeda. Esta falta de contención del agua ha hecho que las walk-in pierdan parte de su atractivo frente a las opciones cerradas. 

Quienes valoran tanto la estética como la funcionalidad encuentran en las mamparas sin marco una solución equilibrada: amplían visualmente el espacio, permiten un mantenimiento más sencillo y reducen el riesgo de humedad en el resto del baño.

Ahora bien, la tendencia más destacada para 2026 será precisamente la vuelta a estas duchas cerradas con puerta de cristal completa. La clave para acertar está en evitar marcos visibles, independientemente del color o del acabado, para conservar esa sensación de limpieza visual que tanto se busca en los baños contemporáneos.

Todo apunta a que la mampara del futuro inmediato será discreta, elegante y sin perfiles, un elemento capaz de transformar un baño sin grandes obras y sin renunciar a la comodidad cotidiana.

Foto | Pexels / IA

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Esta es la sustituta de las antiguas mamparas en la ducha: más luminosidad, practicidad y modernidad

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por
Joana Costa

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